Prácticas restaurativas en procesos conflictivos dentro de contextos comunitarios
Bajo el lema “Por un sistema penal adolescente humano y abierto a la esperanza”, se realizó este martes en la UCA Rosario la jornada de Justicia Restaurativa Paz en los Barrios, que contó con la coordinación del defensor del Pueblo de la provincia a cargo de la Defensoría de Niñas, Niños y Adolescentes, Gabriel Savino.
Este segundo encuentro nacional, que tuvo su parte presencial en la sede de Pellegrini 3314 y que también se transmitió online, contó con la apertura del Luis María Caterina, decano de la Universidad Católica Argentina (UCA); Estrella Robinson, titular del Servicio Público Provincial de Defensa Penal y el padre Fabián Belay.
Además de Savino, expusieron María Dolores Guarrochena, jueza Penal del Juzgado de Menores IV de Rosario; Nicolás Vargas, doctor en Derechos Humanos, docente, investigador y defensor Público Coadyuvante de la Defensora General de la Nación; María Paz Torcigliani, antropóloga, docente e investigadora, y Jean Schmitz, especialista internacional en Políticas Restaurativas y Gestión Integradora de Conflictos.
En su intervención, Savino destacó que la institución que conduce viene trabajando hace décadas “en silencio y con determinación para mejorar la calidad de vida en la comunidad”. En este contexto, destacó la importancia de la Justicia Restaurativa, “un enfoque que no busca reemplazar los procesos judiciales, sino establecer un camino esperanzador entre el punitivismo extremo y el garantismo absoluto”.
El defensor enfatizó que “la Justicia Restaurativa no debe limitarse a los entornos judiciales o a situaciones de encierro carcelario”. "Es fundamental aplicar prácticas restaurativas en procesos conflictivos dentro de contextos comunitarios", afirmó.
Al respecto, señaló que la Defensoría del Pueblo trabaja con una visión propositiva que busca recomponer lazos y relaciones en contextos donde las interacciones sociales han cambiado. Y señaló la necesidad de transformar el paradigma de abordaje en estos espacios.
“No debe ser una moda hablar de procesos restaurativos”, advirtió, resaltando que “se trata de metodologías y enfoques distintos”. “Con más de 32 años de experiencia en la mediación de conflictos y un promedio anual de 1.000 mediaciones comunitarias, la Defensoría ha demostrado un compromiso constante. Sin embargo, en el último año, sólo se abordaron seis casos desde una óptica restaurativa, lo que pone de manifiesto la necesidad de un compromiso a mediano y largo plazo por parte de todos los poderes del Estado”, añadió.
En ese contexto, remarcó que para lograr cambios significativos es necesaria una colaboración entre todas las instancias involucradas y concluyó: “Es necesario avanzar hacia una sociedad más restaurativa en la forma de afrontar las problemáticas”.